el jefe del otoño...

LOS REYES DEL OTOÑO son : AMARILLO SOBRE BLANCO, EL ABEDUL...

Una de las características principales del abedul es la corteza blanca que recubre el tronco. Su madera es bastante vulnerable, por lo que se destina a la fabricación de pasta de papel y tinta de imprenta.

Las primeras civilizaciones encontraban en él muchos antídotos gracias a sus facultades medicinales: por sus propiedades es un buen desinfectante, diurético, cicatrizante e incluso su uso contribuía a controlar la fiebre. Esto le hace ser un gran aliado para el tratamiento de enfermedades del riñón e infecciones urinarias. 

Debido a los usos curativos que encontraban en él, también era utilizado para otras labores más simbólicas. Por ejemplo, se plantaba en la entrada de los establos para ahuyentar a los malos espíritus e incluso también aparece en la Biblia como el ejemplar que daba la bienvenida a los que entraban en el Paraíso. Con la misma intención de purificar, se utilizaban sus ramas para fustigar a delincuentes y dementes, esperando una ayuda extra para la restablecimiento espiritual  de estas personas. 

Una de las conexiones más curiosas que llegan a nuestra época, es la que se remonta a la antigua Roma y los fasces que portaban los lictores. Los lictores eran los funcionarios encargados de escoltar a altos cargos, en la actualidad serían una especie de guardaespaldas-policía. Este cuerpo de seguridad del imperio llevaba siempre colgado del hombro una fasces, que se trataba de un haz de 30 ramas, una por cada curia romana, generalmente de abedul. Su significado era “la unión hace la fuerza” y simbolizaba su capacidad de castigar. En la fasces también podía insertarse una o dos hachas (labrys), en este caso además de castigar, también hablaba del derecho a ejecutar. 
Este símbolo fue uno de los elegidos por Mussolini para su escudo, de cuya raíz latina encontramos la palabra fascista. Independientemente del uso que se dio en Italia durante la primera mitad del siglo XX, aún perdura en muchos escudos como por ejemplo en el nacional de Francia y en nuestro país en el de la Guardia Civil...

Escudo de la Guardia Civil con el haz de lictor entrelazado con una espada rendida

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 Por otro lado, además de su simbología, la corteza del abedul es muy rica en betulina, favoreciendo su capacidad de conservación. Por ello ha sido aprovechada por otros pueblos como los esquimales que confeccionaban vestidos, construían piraguas y elaboraban cuerdas. También los antiguos pastores utilizaban su corteza para elaborar calzado.

  Por último es frecuente encontrarnos  con algunos  abedules repartidos por carreteras y autovías, esto se debe a que gracias a su corteza blanca, es fácil de detectar por los vehículos tanto de día como en horas nocturnas.

Una mirada diferente a partir de ahora para este rey de otoño, ¿tienes alguno cerca de tu casa?...

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