VUELA UNA PALOMA
Nos conocimos en la Peña Muñana cadalseña en 1976.
Formalizamos nuestra relación en la Semana Santa de 1978 y nos casamos el
26-06-1980. El posterior 4 de julio nos presentamos en la Embajada de España en
Argel para tomar posesión.
Nuestro viaje de novios fue para trabajar en un país totalmente distinto al nuestro, el cual padecía graves convulsiones sociales y políticas: Descolonización del Sahara y lucha del Frente Polisario por la independencia que originaron disputas entre Argelia y Marruecos. Invectivas radiofónicas llamando al rencor antiespañol de Antonio Cubillo en Radio Argel, fundador del movimiento separatista y terrorista canario MPAIAC. Sufrimos angustiados un terremoto en octubre de 1980 con epicentro en El Asnam, cerca de Argel, que destruyó el 90% de la ciudad. Se iniciaron las negociaciones hispano-argelinas sobre el gas y el petróleo con la visita de los Reyes en mayo de 1983.
Los islamistas del GIA asesinaron a dos monjas agustinas españolas que nos proporcionaban medicamentos y una ternura infinita; las degollaron a sangre fría al salir de misa.
Había campos de entrenamientos de etarras para matar con escarnio:En nombre de su libertad nos arrebataban la nuestra, ¿por qué tanto odio a España?
Soportamos constantes, inmisericordes y largos cortes de agua imprevistos que nos obligaban a desplazarnos a la Embajada para ducharnos. Por lo demás, podríamos hablar sobre las reivindicaciones y derechos actuales en exEspaña y que posiblemente jamás llegarán allí: Consideración hacia la mujer, derecho de reagrupación familiar y subsidios de ayuda para la integración de los extranjeros, sufragio universal, libre participación social… Ventajas impensables allá que son habituales acá.
Nuestro viaje de novios fue para trabajar en un país totalmente distinto al nuestro, el cual padecía graves convulsiones sociales y políticas: Descolonización del Sahara y lucha del Frente Polisario por la independencia que originaron disputas entre Argelia y Marruecos. Invectivas radiofónicas llamando al rencor antiespañol de Antonio Cubillo en Radio Argel, fundador del movimiento separatista y terrorista canario MPAIAC. Sufrimos angustiados un terremoto en octubre de 1980 con epicentro en El Asnam, cerca de Argel, que destruyó el 90% de la ciudad. Se iniciaron las negociaciones hispano-argelinas sobre el gas y el petróleo con la visita de los Reyes en mayo de 1983.
Los islamistas del GIA asesinaron a dos monjas agustinas españolas que nos proporcionaban medicamentos y una ternura infinita; las degollaron a sangre fría al salir de misa.
Había campos de entrenamientos de etarras para matar con escarnio:En nombre de su libertad nos arrebataban la nuestra, ¿por qué tanto odio a España?
Soportamos constantes, inmisericordes y largos cortes de agua imprevistos que nos obligaban a desplazarnos a la Embajada para ducharnos. Por lo demás, podríamos hablar sobre las reivindicaciones y derechos actuales en exEspaña y que posiblemente jamás llegarán allí: Consideración hacia la mujer, derecho de reagrupación familiar y subsidios de ayuda para la integración de los extranjeros, sufragio universal, libre participación social… Ventajas impensables allá que son habituales acá.
Conocimos a extraordinarios españoles que no sabían rezar y
sin embargo se conmovían cuando oían hablar de España; a algunos los
repatriamos sin vida con una pena inmensa (qué triste es morir fuera de tu
tierra). Durante casi seis años estuvimos allí los dos solos.
Nos hicimos fuertes en soledad ante la incertidumbre y el miedo a lo desconocido. Corrimos un peligro cierto que aguantamos estoicos, convencidos de no tener otra alternativa. No poseíamos nada, salvo hermosos e innumerables proyectos de futuro. Allí creció nuestro amor y decreció nuestra vanidad. Volvimos a Madrid en 1986 al Ministerio. Y aquí seguimos. Treinta y ocho años en Exteriores y cuarenta desde que nos hicimos novios.
En 1983 nació nuestro hijo Miguel y en
1987 nuestra hija Berta. Procuramos educarlos con unos principios que ellos,
afortunadamente, saben asumir y desarrollar cuando el momento lo requiere. De
niños, por las tardes, les llevaba a conciertos de música clásica, a
conferencias literarias, a ver torear con arte y a pasear mientras les hablaba
de mi infancia pobre y feliz en Cadalso. Paloma les enseñó a patinar, a nadar,
a respetar al prójimo, a querer el campo y a encontrar la belleza de lo
cotidiano.
Miguel era hiperactivo y noble, Berta sosegada y segura. Y ambos honrados y sensibles. Y así continúan para nuestra satisfacción. Si te paras a pensar, nada extraordinario. Para qué nos vamos a engañar…
Nos hicimos fuertes en soledad ante la incertidumbre y el miedo a lo desconocido. Corrimos un peligro cierto que aguantamos estoicos, convencidos de no tener otra alternativa. No poseíamos nada, salvo hermosos e innumerables proyectos de futuro. Allí creció nuestro amor y decreció nuestra vanidad. Volvimos a Madrid en 1986 al Ministerio. Y aquí seguimos. Treinta y ocho años en Exteriores y cuarenta desde que nos hicimos novios.
Miguel era hiperactivo y noble, Berta sosegada y segura. Y ambos honrados y sensibles. Y así continúan para nuestra satisfacción. Si te paras a pensar, nada extraordinario. Para qué nos vamos a engañar…
Paloma se levanta a las 5:00h de la mañana, me da un beso
suave y me arropa con delicadeza antes de salir de casa. Llega a Consulares a las 6:30h., enciende su
ordenador y comienza su jornada laboral repartiendo amabilidad y simpatía sin
vanas pretensiones. Siempre responsable y trabajadora como si fuera su primer
día y necesitara hacer méritos.
Muchos estaban en sus pupitres cuando ella ya estaba dando el callo; no en París, Londres o Madrid, sí en Argel. El auténtico motor de esta familia sigue siendo Paloma: buena, discreta, educada, elegante, humilde…
Saca tiempo de donde sea para seguir ofreciéndonos su amor y su dedicación. Conserva intacto su franco optimismo, su generosa sonrisa, su desmedida pasión por la natación y su amor hacia todo lo suyo. Ella siembra cariño donde otros encono.
Muchos estaban en sus pupitres cuando ella ya estaba dando el callo; no en París, Londres o Madrid, sí en Argel. El auténtico motor de esta familia sigue siendo Paloma: buena, discreta, educada, elegante, humilde…
Saca tiempo de donde sea para seguir ofreciéndonos su amor y su dedicación. Conserva intacto su franco optimismo, su generosa sonrisa, su desmedida pasión por la natación y su amor hacia todo lo suyo. Ella siembra cariño donde otros encono.
La echaréis de menos. El tiempo le hará justicia y sabréis
que compartisteis compañía con una mujer colmada de virtudes. Os ofreció lo
mejor de ella a cambio de un poco de comprensión. Ahora comprobará que las
palomas vuelan gracias a su bondad y desde el espacio cadalseño descubrirá que la
queremos de verdad.
Y aunque nosotros jamás podremos volar, nos emocionaremos al verla pasar.
Y aunque nosotros jamás podremos volar, nos emocionaremos al verla pasar.
Enhorabuena paloma ahora a disfrutar de tú muy merecida jubilación
ResponderEliminarEn este momento y en tu nuevo estado de liberación diaria… Paloma la nueva primavera, si aun no está, cuando quiera que llegue, y a disfrutar de tu tiempo, que trae consigo proyectos sin estrenar y modos de vivir que conformen, no solo un bienestar, sino sobre todo, como digo yo , un “bien ser y mejor vivir”.
ResponderEliminarEnhorabuena , y a disfrutar de esa familia ,un abrazo…
Carlos
El amor y las alas nos hacen volar y está claro el vuelo que habéis emprendido juntos ha sido largo vuestros hijos han sabido permanecer en el nido y ahora a volar por su cuenta mucha felicidad en esta nueva etapa y ahora a nadar por la mañana paloma un beso muy grande
ResponderEliminarMuchísimas gracias a todos de corazón. Son muchos recuerdos y experiencias acumulados durante estos años que estos días se me están viniendo a la cabeza y me producen una sensación muy especial. Todo está siendo muy emotivo y sentirse querida es lo más bonito que le puede suceder a una mujer.
ResponderEliminarPaloma Mostacero Herrera
Una bonita entrada en el blog Miguel y bien merecida por Paloma, todo un orgullo para toda la familia y amigos tenerte ahí.
ResponderEliminarTe deseo una gran nueva etapa de tu vida con aún más éxitos y más tranquilidad, todos te queremos y valoramos, un fuerte abrazo y muchos besos.
Miguel, estoy de guardia y te doy las gracias por emocionarme y hacer que la familia siga siendo el motor de nuestra sociedad. Hay gente que quiere derribar este pilar pero la gente de bien no nos vamos a dejar ganar. Lucharemos por los valores de nuestros antepasados, de los cuales nos sentimos muy orgullosos. Un abrazo fuerte y que Paloma disfrute de su jubilación con mucha salud y con sus seres queridos. Buen día.
ResponderEliminarJosé Manuel.
Enhorabuena a Paloma, por su bien merecido descansoy a ambos, por vuestro hermoso proyecto vital, ya más que una gozosa realidad, un premio justo a tanto sacrificio, lucha, entrega por sobrevivir a la vida y al amor que, sin duda, habéis rotulado con mayúsculas. Ahora, con más años, más vida a las espaldas y más tiempo a saborearlo, sin medida, sin límites. Me ALEGRO, vaya si me alegro. Besos y abrazos.
ResponderEliminarB.V.C.
Qué preciosidad. Paloma dile a Miguel que es un ser humano en carne viva. Me ha encantado leerlo. Sabes, Paloma, que siempre te he querido mucho porque siempre formas parte de mi vida.
ResponderEliminarTu prima, Ana Mari.
Saludos de Pablo desde Florida. Un beso
ResponderEliminarHOLA
ResponderEliminarSólo puedo daros una grandísima enhorabuena a ambos:
Paloma, bien ganado retiro. A disfrutarlo
Miguel, por tu prosa
Conjunta (familiar). De vez en cuando es gratificante y motivador comprobar que existe gente sencilla, normal, noble, con méritos y que se dedica a vivir y trabajar y, si puede, querer y ayudar a los demás
Abrazos y besos
Pablo
Bienvenida a la libertad.. Ahora empieza tu vida.. la tuya y solo tuya.. Haz con ella lo que quieras.. Un abrazo fuerte.
ResponderEliminarEl escrito que le has hecho a tu mujer es precioso propio de ti y de un hombre enamorado como lo estas tú.
ResponderEliminarDale a Paloma un abrazo muy fuerte de mi parte y otro también muy fuerte para ti.
Y enhorabuena. Chusa Alonso