lunes, 23 de abril de 2018

la tierra...




























Amanece un nuevo día en Cadalso y no parece querer abrir para lucir nuestro azul del cielo especial, será porque ayer fue el día de la Madre Tierra y está aun enfadado y con razón con los que habitamos este planeta y lo estamos destrozando poco a poco...

Amemos la Tierra...

¿En qué momento los seres humanos nos convertimos en los máximos de predadores, en los destructores por excelencia, en los hijos desnaturalizados que llevamos siglos asesinando a nuestra Madre? Si, la Tierra, según las especulaciones de los científicos, tiene más de cuatro mil quinientos millones de años, los hombres apenas hemos estado sobre su superficie unos pocos segundos dentro del tiempo cósmico.
Y esa breve pausa ha bastado para que ahora tengamos un planeta que se nos está muriendo día a día, y al que ya jamás podremos recuperar o reconstruir. 
Porque todos los seres humanos somos el equivalente al caos, a la barbarie y a la destrucción...

Y lo que nos espera, es mucho peor que lo que ya hemos hecho. Porque seguimos multiplicándonos por decenas de miles todos los días; porque estamos empeñados en perfeccionar los métodos para destrozarnos y acabar de masacrar nuestro propio hogar; porque en esta absoluta locura de maldad y odio en que hemos ido creciendo, inventamos armas químicas, biológicas, nucleares, que sin duda nos borrarán del mundo y dejarán un planeta herido, agonizante, que jamás va a recuperar un amanecer sobre un bosque donde construya la luz el canto de los pájaros...

Oigamos el ruido del agua al correr por los arroyos y no el silencio absoluto de la sequía ...

¿Todavía estaremos a tiempo para frenar la gran catástrofe que hemos propiciado?... Es difícil decirlo; pero quienes amamos la Tierra y la vida tememos que ya no sea posible. A los países, y a los extraños seres que los habitan, los mueven la ambición y la estupidez. Con la primera no se detienen en la carrera de seguir envenenando el planeta en aras de un mal entendido progreso, y con la segunda no les importa el presente y, desde luego, mucho menos el futuro...

Despertemos.


Los Protocolos que se hacen en la Tierra para tratar de salvarla, carecen de valor. Porque las grandes potencias son las primeras en violarlos, y en hacer mofa de sus contenidos donde se asoma tímidamente la esperanza. Y lamentablemente, esta generación, y quizás la de nuestros hijos, serán las últimas que probarán una ciruela, oirán un ruiseñor entre las ramas de los últimos árboles, y verán deshojarse desde el cielo que perdimos, la última de las madrugadas.
En varias ocasiones hemos podido escuchar, como las personas dicen que no hay ningún problema con hacer cosas que saben dañar a la naturaleza, a nuestra madre, a nuestro más grande hogar, pero aun conociendo lo que ocasiona siguen realizando dichas acciones que solamente nos están restando tiempo junto a nuestra madre puesto que ante todas las cosas que hemos provocado y ahora ella se esta defendiéndose, porque si miramos cada una de las cosas que están pasando a nuestro alrededor observamos que nada es por una casualidad, sino que todo está controlado por nuestro planeta, el cual poco a poco está dando a notar que lo estamos hiriendo, pero no todos somos sensibles ante tales cambios, aunque a todos nos atemoriza las cosas que se están dando pero aun con todas las advertencias que día a día nuestra madre nos da a manera de cambios climáticos, pequeñas alteraciones en los niveles de agua, cambios en lo que respecta al comportamiento de animales, de plantas y aun cambios en nosotros mismo, los humanos, quienes nos decimos la especie superior, no nos damos cuenta que somos los que más daño hacemos a nuestro hogar...




--------------------------------------------

No hay comentarios:

Publicar un comentario