Remi , ciclismo y amistad...

Como siempre...

Donde siempre ... 

La garantía de siempre...

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REMIGIO YUSTE: 

PASIÓN POR EL CICLISMO Y LA AMISTAD

Remigio Yuste quiere tanto al ciclismo que se fusiona con él generando un pálpito nuevo. Y te confunde el hecho. Te quedas pensativo mirando sorprendido el conjunto resultante. Esa extraña simbiosis o mezcolanza acaba creando un ser especial. Un asombroso espécimen, mitad humano y mitad bici, engrasado convenientemente con unos goterones de afecto tan propios a su conmovedora personalidad.  

Remigio ha nacido para pedalear y amar al ciclismo y a todo lo que le rodea. Nosotros, al principio, cuando salíamos en bici con él, restregábamos nuestros ojos para volver a la realidad. Le mirábamos y descubrimos una mañana encantadora que era un hombre adosado a un velocípedo. Un ciclista que desprende amistad y amor como chispas eléctricas de entusiasmo desprenden los poetas del asfalto.

Sus manos se proyectan hacia el manillar acariciándole como se hace con la mujer amada. Sus piernas se unen a las bielas alentándolas a seguir la estela  de la vida. Su pensamiento le susurra al sudor de su frente la historia ciclista admirable de su existencia. Sus venas y arterias acaban ramificándose entre los radios de las ruedas haciéndoles brillar de felicidad. Y, por fin, su gran corazón reposa suave en la potencia impulsándole ésta hacia la belleza de la ruta. Fijaos qué ingredientes maravillosos componen esta amalgama remigia y mágica.

A todo esto creemos que debemos otorgarle un nombre específico para diferenciarle del resto de la creación. Bien pudiera ser, por ejemplo: La pasión ciclista de Remigio. Es como una película de aventuras y amores que  filma Remi sobre las carreteras de nuestra tierra querida con una sonrisa. Y como además los ciclistas poseemos una especie de ternura que nos provoca nuestra soledad melancólica y aventurera, hemos creído conveniente reunirnos  hoy  contigo  para  entregártela. De esta forma –seguro- ya nunca te sentirás solo cuando vayas repartiendo afectos desde las aristas generosas de tu bicicleta y de tu corazón.

            TUS COMPAÑEROS DE FATIGAS Y CARICIAS

                          (Miguel MORENO GONZÁLEZ)

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