AMAN teme ser desalojada de
las instalaciones de Aldea del Fresno
Escrito por Javier Rodea
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Escrito por Javier Rodea
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El pasado 10 de febrero tuvo lugar en la residencia para discapacitados psíquicos AMAM, una comida informativa para alcaldes de la zona en la que también asistieron los medios de comunicación. La intención de la asociación era dar a conocer a toda la comarca la existencia de este poblado, que desde 1983 lleva acogiendo a personas discapacitadas difíciles de tratar, con patologías incluso violentas, y también recoge a aquellos discapacitados con avanzada edad sin padres o familiares que les puedan proteger.
AMAN, con más de 20 años recogiendo discapacitados, está situada sobre los terrenos de un antiguo poblado donde vivían los trabajadores de la central eléctrica de Aldea del Fresno, pertenecientes a la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT). Ahora teme ser desalojada.
Para renovar este convenio con la CHT, la asociación necesita que se le expida desde el Ministerio del Interior el denominado Documento de Utilidad Pública, como asociación sin ánimo de lucro. Resulta que este documento ha sido denegado desde el citado ministerio alegando que ellos "no habían recibido informes" procedentes desde el propio ayuntamiento de Aldea del Fresno y La Comunidad. AMAM ha recurrido y, ante un error de forma, la CAM ha ofrecido su propio gabinete jurídico a la asociación.
- Alumnos de AMAM durante sus horas lectivas. Javier Rodea -
El camino que lleva hasta la Asociación Madrileña de Ayuda al Minusvalido (AMAM) en Aldea del Fresno es tortuoso. El asfalto no está mal pero la calzada es estrecha. Esta asociación ha reconstruido un antiguo poblado, donde en su día habitaron trabajadores de "la central de saltos" de Picadas. De casas derruidas, han construido un pueblo, un hogar, un lugar donde refugiarse y vivir aquellas personas que la sociedad no quiere o les molesta por tener una discapacidad psíquica, subnormales si no fuera políticamente incorrecto utilizar esta palabra.
Aquí, en AMAM, se ha forjado una residencia siguiendo unas reglas mínimas de convivencia entre los propios discapacitado. Han creado una sociedad civil en chiquito a la media de su coeficiente intelectual, por tener "tienen hasta alcaldesa”, votada en unas elecciones donde se presentaron cuatro partidos.
130 personas conviven en este pueblo, 81 de ellos internos, el resto, externos, vienen a diario en un autobús, realizando tareas de manipulado o más físicas por las mañanas y didácticas/aprendizajes por las tardes. Hace años los internos cultivaban un huerto donde recolectaban sus hortalizas y criaban gallinas para sacar unas perrillas con la venta de los huevos. Ahora, engarzan perchas de ropa para almacenes y, los que pueden valerse por si mismo, participan en cursos de la Escuela Medioambiental de Chapinería.
Después de su "jornada laboral" tienen su ocio y sus ratos de distracción, como cualquiera de nosotros, y los más autónomos nos enseñan su habitación y su armario, recogido, pulcramente ordenado. Los más mayores nos cuentan los programas que les gusta de la tele en la salita que tienen para su esparcimiento, y Pachi enseguda te reta a jugar al Scalextric, su ídolo es Fernando Alonso.
Esta asociación ha reconstruido un antiguo poblado, donde en su día habitaron trabajadores de "la central de saltos" de Picadas
130 discapacitados conviven (entre internos y externos) atendidos por 51 trabajadores
Este milagro, que estos chicos sean tratados con dignidad y respeto, es obra de Dª María del Rosario Lillo del Pozo Ollero, acortando, Charo, que un buen día, la naturaleza quiso regalarle un hijo con una discapacidad, agravada de una patología violenta, cuando ya adulto, no encontró un lugar donde pudieran tratarle. Harta de noes, en el camino se encontró a otros padres con hijos en la misma situación y decidieron fundar la asociación, en la Naturaleza, sobre las ruinas del poblado dejado por la compañía eléctrica.
Aparte de los edificios donde se ubican las habitaciones, hay una lavandería, una enfermería con su farmacia, una cocina industrial, un pabellón comedor que hace las veces también de salón de actos en las celebraciones festivas, barracones para aulas y hasta una pequeña iglesia, que se han propuesto reformar, donde los domingos, quien lo desee, puede asistir a misa.
AMAN, con más de 20 años recogiendo discapacitados, está situada sobre los terrenos de un antiguo poblado donde vivían los trabajadores de la central eléctrica de Aldea del Fresno, pertenecientes a la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT). Ahora teme ser desalojada.
Para renovar este convenio con la CHT, la asociación necesita que se le expida desde el Ministerio del Interior el denominado Documento de Utilidad Pública, como asociación sin ánimo de lucro. Resulta que este documento ha sido denegado desde el citado ministerio alegando que ellos "no habían recibido informes" procedentes desde el propio ayuntamiento de Aldea del Fresno y La Comunidad. AMAM ha recurrido y, ante un error de forma, la CAM ha ofrecido su propio gabinete jurídico a la asociación.
- Alumnos de AMAM durante sus horas lectivas. Javier Rodea -
El camino que lleva hasta la Asociación Madrileña de Ayuda al Minusvalido (AMAM) en Aldea del Fresno es tortuoso. El asfalto no está mal pero la calzada es estrecha. Esta asociación ha reconstruido un antiguo poblado, donde en su día habitaron trabajadores de "la central de saltos" de Picadas. De casas derruidas, han construido un pueblo, un hogar, un lugar donde refugiarse y vivir aquellas personas que la sociedad no quiere o les molesta por tener una discapacidad psíquica, subnormales si no fuera políticamente incorrecto utilizar esta palabra.
Aquí, en AMAM, se ha forjado una residencia siguiendo unas reglas mínimas de convivencia entre los propios discapacitado. Han creado una sociedad civil en chiquito a la media de su coeficiente intelectual, por tener "tienen hasta alcaldesa”, votada en unas elecciones donde se presentaron cuatro partidos.
130 personas conviven en este pueblo, 81 de ellos internos, el resto, externos, vienen a diario en un autobús, realizando tareas de manipulado o más físicas por las mañanas y didácticas/aprendizajes por las tardes. Hace años los internos cultivaban un huerto donde recolectaban sus hortalizas y criaban gallinas para sacar unas perrillas con la venta de los huevos. Ahora, engarzan perchas de ropa para almacenes y, los que pueden valerse por si mismo, participan en cursos de la Escuela Medioambiental de Chapinería.
Después de su "jornada laboral" tienen su ocio y sus ratos de distracción, como cualquiera de nosotros, y los más autónomos nos enseñan su habitación y su armario, recogido, pulcramente ordenado. Los más mayores nos cuentan los programas que les gusta de la tele en la salita que tienen para su esparcimiento, y Pachi enseguda te reta a jugar al Scalextric, su ídolo es Fernando Alonso.
Esta asociación ha reconstruido un antiguo poblado, donde en su día habitaron trabajadores de "la central de saltos" de Picadas
130 discapacitados conviven (entre internos y externos) atendidos por 51 trabajadores
Este milagro, que estos chicos sean tratados con dignidad y respeto, es obra de Dª María del Rosario Lillo del Pozo Ollero, acortando, Charo, que un buen día, la naturaleza quiso regalarle un hijo con una discapacidad, agravada de una patología violenta, cuando ya adulto, no encontró un lugar donde pudieran tratarle. Harta de noes, en el camino se encontró a otros padres con hijos en la misma situación y decidieron fundar la asociación, en la Naturaleza, sobre las ruinas del poblado dejado por la compañía eléctrica.
Aparte de los edificios donde se ubican las habitaciones, hay una lavandería, una enfermería con su farmacia, una cocina industrial, un pabellón comedor que hace las veces también de salón de actos en las celebraciones festivas, barracones para aulas y hasta una pequeña iglesia, que se han propuesto reformar, donde los domingos, quien lo desee, puede asistir a misa.
Charo no está sola, le acompañan 51 personas
dependen de esta asociación entre,
médico, psicólogos, enfermeras,
trabajadoras sociales, terapeutas,
fisioterapeutas, maestros, monitores,
cuidadores, mantenimiento ocupacional..
. (pocas empresas en la comarca pueden
presumir de mantener tanto personal).
Noticia recogida de nuestro periódico La Almenara...ver entrevista en :
www.la-almenara.com/
DE LO DE SIN ANIMO DE LUCRO , NO ES VERDAD, Y OJALA LO CIERREN Y OTRAS PERSONAS LO ABRAN CON GANAS DE TRABAJAR Y SIN ANIMO DE LUCRO
ResponderEliminarpor suerte mis dos unicos hijos estan en el centro gracias a la ayuda de la directora y personal del centro ya que no me concedian plaza y por motivos personales debido a una enfermedad grave que me afecta a mi fue alli donde fueron aparar para ser atendidos y cuidados mientras me pude recuperar y seguir para adelante por lo cual are todo lo que este en mi mano para que el centro siga adelante
ResponderEliminargracias a la directora y personal del centro mis dos unicos hijos estan cuidados y atendidos una madre enferma y sola are lo que este en mi mano para que amam siga adelante teneis todo mi apoyo
ResponderEliminarLo mejor los chicos son maravillosos, la gestión nefasta, falta siempre personal y los empleados que hay están insatisfechos con su trabajo y régimen dictatorial de la directiva que genera un ambiente tóxico. No hay nada de material didáctico para que pinten o trabajen los chicos, ni hojas de papel hay, una pena!!
ResponderEliminardeverdad
EliminarNecesita un cambio en la administración y dirección, la directora Dña. Charo Lillo del Pozo Ollero es que menos incapaz de dirigir un centro de estas características, claramente los años hacen en ella mella a nivel cognitivo, los trabajadores no le duran por la tiranía de sus opiniones, echa a la gente por tener buena relación con sus compañeros, por pensar diferente, o simplemente por que quiere "tu trabajo es impecable pero ya sabes como es Charo" alega su hija( subdirectora)
ResponderEliminarcuando despide a la gente de forma improcedente , los trabajadores que duran mantienen una guerra con ella y ninguno tiene la titulación necesaria para ejercer, de ahí que los tenga dados de alta como personal de limpieza y ejerciendo de cuidadores,ojalá hagan algo con este centro ya que las instalaciones no están nada mal (a falta de alguna reforma) y tiene muchísimas posibilidades para los chicos.